lunes, octubre 15, 2007

Un, dos, tres... toca la pared

Un. Dos, tres, toca la pared... Un, dos, tres, toca la pared.... Un, dos, tres, toca la pared.... Jopé, pues me doy la vuelta y no viene nadie.

Que no, que no me he vuelto loco después de tato desfile de la Hispanidad. Es que estoy jugando a esta versión del escondite inglés, sin mover las manos ni los pies, a la que juegan los niños de El Orfanato (la película española precandidata a los Oscar), y que al parecer puede servir también para comunicarse con los muertos, no veas tú que miedo que me está entrando ya por el cuerpo.

A mi es que las pelis de miedo siempre me han gustado. Bueno, todas no, porque las que parecen más un vídeo de promoción de "Charcuterías Agripino, te meto y te saco el intestino", esas no. A mi me gustaban, ya desde pequeño, las de terror psicológico, que no sabes bien si lo que ocurre está sólo en tu cabeza o habita ahí afuera, las que tratan esa frontera difusa y desconocida entre la vida y la muerte... vamos, que era un niño muy rico y simpático yo de pequeño, ya lo decía mi madre.

Mi hermano, por ejemplo, no estaba tan de acuerdo con esa opinión de mi madre porque luego, claro, venían las pesadillas y delirios nocturnos, de tanto tentar a la imaginación:

- ¡Mamá!, ¡mamá!
- Qué quieres, hijo, a estas horas, que son las cuatro de la madrugada.
- Es que estili se despierta, abre mucho los ojos, me mira fijamente y no sé qué dice del más allá y el más acá.
- No le hagas caso y sigue durmiendo, que ya sabes cómo es tu hermano de fantasioso. Mañana ni se acuerda.

El orfanato va por ahí, habla de esa frontera entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos, y es difícil dejar de verla sin compararla con Los otros, su antecesora y referencia más directa. Como también resulta difícil saltarse la comparación entre Belén Rueda y Nicole Kidman, espléndidas ambas. La española es, sin duda, la principal apuesta de El orfanato. Yo me quedo, más que con su dicción, que se me antoja mejorable todavía, con la facilidad con que su rostro transmite la desesperación y el dolor. Y no sólo su rostro, también sus manos, como ocurre en una bella escena de un primer plano de la protagonista tocando el piano que no debería pasar desapercibida.

Que no se me ponga nervioso el personal que no haya visto la película, que no voy a meter la pata. Este texto no contiene "spoilers". Para avisar al despistado y confiado lector de que un texto te va a fastidiar el final de una película o de una novela de intriga, que ya hay que tener mala leche, en internet se usa mucho ese término, “spoiler". La primera vez que la vi pensé yo que la palabreja se refería a los alerones de los coches (“alerones” también llamábamos en el cole a los niños orejotas, entre lo que un servidor se encontraba, me temo, que hay que ver las vueltas que da el lenguaje). Se podría traducir por algo así como “aguafiestas”, o si quieres ser más claro incuso bocazas, mamonazo, metete-la-lengua-donde-te-quepa...

Así que para evitar enfados y disgustos no voy a desvelar yo aquí el final de El orfanato, que no te creas, que me dan unas tentaciones... Pero en fin, casi mejor que voy a seguir jugando.

Un. Dos, tres, toca la pared... Un, dos, tres, toca la pared.... ¡Aaaaaaaaaah!

24 comentarios:

tootels dijo...

debo ser el único que aún no la ha visto... muahaauahhaaaa!!

Viguetana dijo...

Yo tampoco la he visto. Y no sé si lo haré. Porque mi hermano era como tú de pequeño y cuando mis padres no estaban, se iba a alquilar pelis de miedo y me las ponía todas.
O sea, que yo terminé por desarrollar una especie de coraza ante todo tipo de masacres y maldades que ahora hace que estas pelis no me hagan ni fu ni fa.

Eso sí, me apunto a jugar al escondite inglés.
Por cierto, en catalán se dice: "Un, dos, tres, butifarra de pagès!"
:-P

Besitos de lunes

Mariano Zurdo dijo...

¡Otro que no la ha visto!
¿Así que has sido tú, Estilografic, el que aparecía en todos los periódicos como EL espectador que había ido a ver El orfanato...
Gracias por no spoliarnos o espolearnos o espoliarnos, leches, que ya me he líado.
¡Ponme otra mahou! (uy, perdón, que esto era de la entrada anterior!

Javier Menéndez Llamazares dijo...

Yo creo que paso del orfanato. Debe de ser una fijación con (o contra) Belén Rueda, porque tampoco fui a ver Mar adentro...
El caso es que las pelis de mal rollo no me ponen na, pero na de na.
Ni Los otros, ni Los lunes al sol, ni Barrio, ni las de ese palo.
Casi prefería las comedietas madrileñas, con Óscar Ladoire haciendo el ganso y sus buenas dosis de anatomía "por exigencias del guión".

estilografic.blog dijo...

Miedo me estáis dando, hombre.

Tootels: pues tu foto se parece un huevo a la del niño protagonista, que lo sepas.

Viguetana: si es que los hermanitos son terroríficos. Cómo me molan, por cierto, tus clases de catalán.

Mariano: ese so, ese so, eso soy yo.

Javier: pues me temo que nos van a bombardear con ella en los próximos días. Si no te gustan las de terror desde luego que te la puedes ahorrar, porque, hombre, no está mal, pero no sé yo si para Oscar.

Isabel Burriel dijo...

Pues supongo que algún día la veré aunque solo sea por puro morbo. Y puesto que morbo es la atracción por lo desagradable pues me dedicaré a ello que lo hago de pascuas a ramos que soy muy impresionable y no me gusta pasar miedo por puro placer.

Desesperada dijo...

dios k ganas tengo de verla, adoro las pelis de miedo!!!!! y yo también jugaba al escondite inglés, adoraba ese juego!!! de dónde vendría?

Viguetana dijo...

¿Puedo volver a comentar? Es que me he acordado de una cosa muy simpática...

estilografic.blog dijo...

Viguetana: eres como los espíritus. Vas y vienes. Adelante, toca la pared.

Mariano Zurdo dijo...

A veces veo viguetanas...

estilografic.blog dijo...

Cagaíto me hallo

estilografic.blog dijo...

Viguetana: si estás ahí y puedes oírme, manifiéstate, que esto ya no tiene gracia. Me veo contratando a un medium.

estilografic.blog dijo...

Inte, Deses y Mariano, que con el susto de viguetana olvidé contestaros:

Inte: No es que dé mucho mucho miedo, y tampoco es desagradable. En ese sentido la puedes ver tranquila.

Deses: te digo como a Javier. Si te gustan las de miedo, como a mí, te gustará, pero tampoco es que sea un pedazo de peliculón.

Mariano: yo a veces veo marianos por todas partes.

Mariano Zurdo dijo...

Eso va a ser cosa de los espejos rotos...

Paco Melero dijo...

Pues la vi el sábado y sí, la comparación con Los Otros es inevitable. De hecho, creo que el director tampoco la evita (desde la primera escena en que aparece Belén levantándose de la cama, igual que hacía la Kidman). Me gustó, sí, pero con matices.

Viguetana dijo...

He vuelto...
Pues nada, que una vez jugué al "un, dos, tres..." con personas de distintas nacionalidades (1 ruso, 1 noruego, 1 sueco, 1 italiana, 2 belgas, 1 francés, 1 inglés, 1 suiza) y fue muy divertido escuchar como sonaba la tonadilla en cada idioma. Curiosamente, todos entonábamos igual pero cada uno hablaba de cosas distintas.
Recuerdo que el ruso decía no sé qué de unos peces.

Por cierto, Estili: que me ha parecido ver pasar a un Mariano girando a siniestra... ¡qué yuyu!

Kim dijo...

Pero Viguetana, eso parece un chiste coño, con tanto extranjero.

Y el final ya os lo cuento yo coño. Los muertos son ellos.

estilografic.blog dijo...

Mariano: el problema es que no se reflejan en los espejos, los marianos.

Paco Melero: de acuerdo contigo, en lo de Los Otros y en lo de los matices. Y bienvenido.

Viguetana: asustaíto me tenías. Ya había sacado la ouija y todo, para invocarte. Una duda: ¿era el Un, dos, tres, toca la pared o el Un, dos, tres, responda otra vez? Y cuidado con el Mariano siniestro ese.

Clandestino: eso era en Los otros, no me líes al personal, fantasma, que eres un fantasma.

Blasfuemia dijo...

Yo no la he visto tampoco, pero caerá (eso sí: mejor acompañada).

Yo a veces veo spoiler (pensé que, efectivamente, caería uno. Buena cintura la de estilografic regateando el spoiler, con las ganas con las que se habrá quedado)

Javier Menéndez Llamazares dijo...

¿Cómo, que no es para Óscar?
Ya, ya: es que para Óscar Ladoire todo es poco... Lástima que Resines le robase el papel y el destino. Aunque total, para acabar haciendo Los Serrano, no sé yo si valía la pena. Por muchas escenas de amor que tuviera con Belén Rueda.
Por cierto que en mi barrio se decía "un dos tres, esconderite inglés".

Anónimo dijo...

Decididamente tengo que cambiar la hora de leerme las entradas, porque ahora mismo estoy cagaíta de miedo sin atreverme a levantarme de la silla y mucho menos mirar a mis espaldas. ¡Cabrones!, ya no sé si me da más miedo la entrada o los comentarios.
Acojonada me hallo.

Kurtz dijo...

Precisamente hoy he visto la película y es bastante buena. Lo mejor, Belén Rueda.
Saludos.

Mariano Zurdo dijo...

Hace años decir que lo mejor de una película era Belén Rueda hubiera sido una crítica pavorosa.
¡Cómo cambian los tiempos!

tootels dijo...

NO ME JOOOODAAAASS...