Ante los sucesos que tuvieron lugar en el transcurso de la fiesta virtual organizada por Mariano, el de La tinta azul de la memoria, el pasado martes y trece - que también tiene narices la fecha que elige, el tío -, con motivo de la celebración de la apertura de su nuevo blog, denominado, en brillante juego de palabras, “Blog de literazurda”, y las noticias que en los medios se han venido publicando en el día de hoy, en mi opinión poco fieles a la realidad de lo sucedido, quiero aclarar públicamente esto mismo, es decir, “la realidad de lo sucedido”, de forma sincera y humilde:
Primero, pedir disculpas a la blogosfera y a quien se haya podido sentir perjudicado.
Segundo, explicar que todo comenzó a partir de algo más o menos común y conocido que yo personalmente padezco que es el miedo a la fiestas virtuales en las que participa mucha gente. Debido a que soy padre de familia y en estado civil casado, sin que en mi matrimonio se haya producido, que yo sepa, "cese temporal de la convivencia", era mi primera fiesta en mucho tiempo, y en previsión de mi miedo opté por tomar un par de copas antes de entrar para, en la medida de lo posible, desinhibirme de dicha dificultad. Una vez comenzado el vuelo, digo la fiesta, y después de cierto tiempo de tranquilidad en casa de Mariano, comencé, sinceramente, a sentirme intranquilo y temeroso de que pudiera desencadenarse en mi un ataque de pánico dentro del fiestorro, del que, dicho sea de paso y en rima, comenzaba a estar hasta el gorro. Ante tal indeseable sensación, que me resulta difícil de controlar, ciertamente agitado solicité a la tripulación del avión, digo a la camarera del fiestón, me sirvieran un combinado según el derecho que, creo, me otorga la invitación recibida.
Sin embargo, lejos de ser satisfecha dicha mi, creo, justa y muy normal, petición, fui tratado, considero, de forma no muy cordial por un miembro de seguridad del fiestón, el cual simple y llanamente me negó la consumición aduciendo que ya había bebido bastante. Yo, inquieto, reconozco que increpé, quizá subido de tono, la respuesta del miembro de seguridad del fiestón, momento en el que se desencadenó una discusión entre nosotros dos por la ya referida cuestión. Hubo por mi parte algún insulto, del cual me arrepiento y me retracto, pero en el contexto de una discusión recíproca en torno a lo que yo considero mi derecho como invitado. Lejos de ser diplomático, el miembro de seguridad del fiestón entró al trapo y me desafió personalmente. El enfrentamiento subió de tono pero siempre de forma estrictamente verbal, hasta que llegó la calma.
Después de haberse, creo, solucionado el enfrentamiento, desistiendo yo de seguir con el mismo, el anfitrión decidió, de forma absolutamente desproporcionada e innecesaria, en mi opinión, una grave medida muy inconveniente y dañina para todo el pasaje, digo personal, consistente en mandarnos a todos a nuestras casas sin que hubiera en ese momento ninguna situación de riesgo explícito ni patente para nada ni nadie en el fiestón. A partir de ahí lo que hizo el anfitrión fue "informar" a los blogueros de que volvíamos a nuestra casas "por mi culpa", cuando creo que es evidente y constatable que esto está muy lejos de ser así. El fiestón podía y debía perfectamente haber continuado con absoluta normalidad y sin riesgo alguno para nada ni para nadie.
De cualquier modo, y al margen de todo cuanto queda relatado y considerado con absoluta sinceridad y humildad deseo, terminar pidiendo disculpas por si mi conducta, ciertamente subida de tono, hubiera molestado u ocasionado algún inconveniente a cualquiera de los blogueros o miembros del fiestón.
Poco más puedo añadir. Reiterar mis disculpas a todos, mi profundo malestar por lo sucedido y mi arrepentimiento de aquello que estrictamente a mi respecta.
Fdo: Ramón Melendi Espina, digo Estilografic Punto Blog
He tenido que cambiar “avión” por “fiestón”, “pasajeros” por “blogueros” “comandante” por “anfitrión” y algún que otro detalle sin importancia, pero agradezco profundamente a Melendi que prácticamente me haya escrito el post de hoy. Hay que reconocer que este tío es un artista, qué narices.
Primero, pedir disculpas a la blogosfera y a quien se haya podido sentir perjudicado.
Segundo, explicar que todo comenzó a partir de algo más o menos común y conocido que yo personalmente padezco que es el miedo a la fiestas virtuales en las que participa mucha gente. Debido a que soy padre de familia y en estado civil casado, sin que en mi matrimonio se haya producido, que yo sepa, "cese temporal de la convivencia", era mi primera fiesta en mucho tiempo, y en previsión de mi miedo opté por tomar un par de copas antes de entrar para, en la medida de lo posible, desinhibirme de dicha dificultad. Una vez comenzado el vuelo, digo la fiesta, y después de cierto tiempo de tranquilidad en casa de Mariano, comencé, sinceramente, a sentirme intranquilo y temeroso de que pudiera desencadenarse en mi un ataque de pánico dentro del fiestorro, del que, dicho sea de paso y en rima, comenzaba a estar hasta el gorro. Ante tal indeseable sensación, que me resulta difícil de controlar, ciertamente agitado solicité a la tripulación del avión, digo a la camarera del fiestón, me sirvieran un combinado según el derecho que, creo, me otorga la invitación recibida.
Sin embargo, lejos de ser satisfecha dicha mi, creo, justa y muy normal, petición, fui tratado, considero, de forma no muy cordial por un miembro de seguridad del fiestón, el cual simple y llanamente me negó la consumición aduciendo que ya había bebido bastante. Yo, inquieto, reconozco que increpé, quizá subido de tono, la respuesta del miembro de seguridad del fiestón, momento en el que se desencadenó una discusión entre nosotros dos por la ya referida cuestión. Hubo por mi parte algún insulto, del cual me arrepiento y me retracto, pero en el contexto de una discusión recíproca en torno a lo que yo considero mi derecho como invitado. Lejos de ser diplomático, el miembro de seguridad del fiestón entró al trapo y me desafió personalmente. El enfrentamiento subió de tono pero siempre de forma estrictamente verbal, hasta que llegó la calma.
Después de haberse, creo, solucionado el enfrentamiento, desistiendo yo de seguir con el mismo, el anfitrión decidió, de forma absolutamente desproporcionada e innecesaria, en mi opinión, una grave medida muy inconveniente y dañina para todo el pasaje, digo personal, consistente en mandarnos a todos a nuestras casas sin que hubiera en ese momento ninguna situación de riesgo explícito ni patente para nada ni nadie en el fiestón. A partir de ahí lo que hizo el anfitrión fue "informar" a los blogueros de que volvíamos a nuestra casas "por mi culpa", cuando creo que es evidente y constatable que esto está muy lejos de ser así. El fiestón podía y debía perfectamente haber continuado con absoluta normalidad y sin riesgo alguno para nada ni para nadie.
De cualquier modo, y al margen de todo cuanto queda relatado y considerado con absoluta sinceridad y humildad deseo, terminar pidiendo disculpas por si mi conducta, ciertamente subida de tono, hubiera molestado u ocasionado algún inconveniente a cualquiera de los blogueros o miembros del fiestón.
Poco más puedo añadir. Reiterar mis disculpas a todos, mi profundo malestar por lo sucedido y mi arrepentimiento de aquello que estrictamente a mi respecta.
Fdo: Ramón Melendi Espina, digo Estilografic Punto Blog
He tenido que cambiar “avión” por “fiestón”, “pasajeros” por “blogueros” “comandante” por “anfitrión” y algún que otro detalle sin importancia, pero agradezco profundamente a Melendi que prácticamente me haya escrito el post de hoy. Hay que reconocer que este tío es un artista, qué narices.
P.D: Perdóname la broma, Mariano, pero no lo he podido resistir. No sé si será la mejor forma de dar a conocer tu nuevo blog, pero en fin, desde aquí le deseo lo mejor.
Con todo mi cariño y admiración.
Ah, y gracias por el fiestón.
12 comentarios:
No había visto el comunicado del Mindundi ese o Melendi, o como diga que se llama.
Valiente niñato. Ya, al estar todo el día borracho le llaman miedo a volar. Y yo soy Campanillaaaaaa.
Besos
Y menudas O***** le metimos entre todos al barrigudo C***** del segurata :P
Ais, el espíritu Melendi me atrapa :)))
Mindundi, digo Estilografic. Tú tranquilo majete que del segurata ya he dado yo buena cuenta, que es que les das una porra y se convierten en Conan el Barbero.
Eso sí, peazo de tajá que te agarraste ayer. Y lo peor es que me habéis dejado el blog como una pocilga y a estas horas ni siquiera he podido escribir una crónica sobre la fiesta, pero caerá antes de caer el sol.
Gracias por tu presencia y por el apoyo, compañero mindundi.
Campa, digo Inte: iba a rescribir todo el comunicado, pero después de leerlo y releerlo he decidido dejarlo casi tal cual, porque es que no tienen desperdicio.
Belén: yo es que llegó un momento en que no me enteraba de nada. ¿Dónde dices que pasó eso?
Mariano zurdo: cuidadito con el sol, cuando caiga.
Estil, ¿y qué dice tu mujer de todo esto? Ah!! que no lo sabe!! Vaya por Melendi, digo, por dios.
Uf, qué susto, Estili, que ya me estaba yo poniendo intranquila pensando: "ostrás, ¿y por dónde andaría yo, que no me enteré de nada?
Bueno, bueno, ¿qué tal el dolor de cabeza? jejeje
Yo hoy me he despertado vestida con unos pantalones muy chulos y un albornoz que no eran míos.
Suerte que después he leído el comentario de Wen y ya se los he devuelto en su blog.
Ay, ojalá hubiera más fiestones de éstos cada tanto, ¿no?
Y al Melendi éste... pero ¿a quién se le ocurre ponerse semejante nombre, pordios?
Vitru: calla, calla, que esto puede ser causa de "cese temporal de convivencia".
Vigue: la próxima, en casa de Melendi.
Estilografic, no es por incordiar, pero estate al loro que hay un coleguita con muy malas pintas que te ha copiado toda tu entrada y ha hecho un comunicado de prensa y todo.
Te lo prometo por mindundi que es así. ¡Cuánto plagiador, dios!
estili, eres un as. de verdad te lo digo.
Mariano Zurdo: acaba de llamarme alguien, y en el identificador de llamadas me está sonando lo de "...no quiero perderme nadaaaa, del domingo y su jornadaaaa, ni mucho menos un gol".
Deses: siguiendo con el símil futbolístico y periodístico: y tú dejas "Marca".
me sonrojo, me sonrojo!
Jajajajaja... genial.
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