No sé por qué, pero me gusta eso de cruzarme con gente que no saluda. Esconden algo, lo sé, y eso me inquieta. Si no, ¿qué les cuesta? Los hay en el portal, en el patio, en la oficina, en los ascensores... A veces me dan miedo incluso, pero sobre todo siento curiosidad, me come la curiosidad. Por eso es que no dejo de saludarlos, aunque no debería hacerlo más. Espero de ellos que un día me digan, oh, disculpe, disculpe usted por todo este tiempo pasado sin haberle saludado, pero es que, compréndalo, yo es que escondo algo terrible, algo que no puedo contar a nadie.
¿Y qué?
Pues eso, que tengo miedo de que se me escape, al saludar, si empiezo a hablar, seguro que se lo contaría, porque no puedo ocultarlo ya más, necesitaría desahogarme, pero me resisto, tengo miedo de que lo sepan los demás, y claro, lo mejor es eso, no saludar, hacer como que no veo, no oigo, no siento. Nada, no digo nada y punto, entiéndame y discúlpeme, querido vecino, y que tenga usted un buen día.
Pues nada hombre, queda usted disculpado, pero no lo vuelva hacer. No, no me refiero a lo del saludo, que eso en el fondo me da igual, si total se trata de una pura convención, a nadie se le hace daño al no hacerlo, ni a nadie se le soluciona la vida al hacerlo. Aunque tampoco está mal, lo de la educación. Me refiero a lo que oculta, que no lo vuelva a hacer, hombre, que debe ser muy pero que muy gordo. Y adiós muy buenas.
¿Y qué?
Pues eso, que tengo miedo de que se me escape, al saludar, si empiezo a hablar, seguro que se lo contaría, porque no puedo ocultarlo ya más, necesitaría desahogarme, pero me resisto, tengo miedo de que lo sepan los demás, y claro, lo mejor es eso, no saludar, hacer como que no veo, no oigo, no siento. Nada, no digo nada y punto, entiéndame y discúlpeme, querido vecino, y que tenga usted un buen día.
Pues nada hombre, queda usted disculpado, pero no lo vuelva hacer. No, no me refiero a lo del saludo, que eso en el fondo me da igual, si total se trata de una pura convención, a nadie se le hace daño al no hacerlo, ni a nadie se le soluciona la vida al hacerlo. Aunque tampoco está mal, lo de la educación. Me refiero a lo que oculta, que no lo vuelva a hacer, hombre, que debe ser muy pero que muy gordo. Y adiós muy buenas.
PD: Y si se trata de mal humor, eso tiene fácil arreglo:
12 comentarios:
Cuánto timpo sin leerte.
Por cierto, hola eh.
Muy buenos días tenga usted. Qué grato encontrarle de buena mañana. Póngame a los pies de su señora y de sus niñas.
Clandestino: bienvenido a casa de nuevo.
Mariano: hay que ver qué buena educación... para la ciudadanía.
Buenas tardes Estilografic. ¿Cómo está usted hoy?
Muy interesnte su entrada pues esta mañana pensaba eso mismo yo en la parada del autobús.
Yo veo en la parada todos los días a la misma gente, nadie saluda, nadie dice nada hasta hoy, que me ha saludado una chica.
La sonrisa que se me ha dibujado en la cara era tan grande que podía iluminar la calle entera.
Inte, ante todo buenas tardes. Tengo escrito un relato sobre eso, sobre coincidir todos los días en el metro y ser unos completos extraños que no se saludan.
Pues lo dicho, que ha sido un placer inusitado hablar con ustedes vosotros. No, no, pase usted primero, faltaría más... Buenas tardes les de dios...
Yo de entrada siempre sonrio cuando digo hola. Y me molesta horrores que no me sonrian cuando sonrio, hasta el punto de no sonreirle más, pero Hola, eso siempre. Que menos!
Por cierto Estili, Hola ...
Joer, he releido mi comentario y me ha quedado muy, no sé. No te estoy echando los tejos eh!!!!!
Os encuentro muy educados, graciosillos pero muy educados.
adiós
ja ja ja ja ja, ¿te asusté?
deses: mo estaría mal cambiar el "hola" por un "adiós" para todo el que no saluda.
apoyo la moción. así que a ti te digo HOLA!
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